domingo, 20 de septiembre de 2015

Carta a un ser entristecido

Ha pasado ya un tiempo de verte sonreír.
Te he visto sonreír y luego, sin pensarlo dos veces, he vuelto a casa.
Te he visto sonreír y he vuelto a casa.
Te he visto sonreír y he vuelto a casa.
Te he visto sonreír y he vuelto. Así, constantemente.
Pero hace un momento me he fijado.
Me he fijado y no cabe duda: jamas te he visto sonreír.

Cada tarde me pregunto si eres o no fuiste. Verás, existen dos tipos de personas que se encuentran.
Están quienes se encuentran presentes en un lugar determinado y están quienes se encuentran a ellos mismos en cualquier lugar.

Querido ser entristecido, yo he venido a decirte que mi persona se ha fijado: tú no te encuentras.